Montevideo Music Group's video: Los Mareados - Lo que nos Queda

Los Mareados - Lo que nos Queda Esta canción... en fin, no me gusta mucho traducir las canciones, pero creo que el tema es que cuando la vida se empieza... no diría a apagar, pero cuando la lamparita arrancó a hacer guiñadas, uno se agarra, como un salvavidas, de las cosas lindas. Y la música (acá decimos «una canción», pero hablamos de la música) es de las cosas más lindas, porque está todo ahí. Y a veces, con una simple canción, la lamparita brilla, por un rato, como cuando estaba nueva. Los Mareados Esta canción parece estar hecha para este año complejo que vivimos, y sin embargo Los Mareados la grabaron a principio del invierno, en las Sesiones en vivo de MMG. Una canción que no habíamos escuchado anteriormente y ya nos dejó sonando en la cabeza, además de una serie de ideas profundas y concretas, una música que se queda. Sentimos que pueda ser una de esas canciones que trascenderán los tiempos. Pero ustedes dirán. MMG Cuando empezás a percibir más tiempo atrás que por venir, cuando la vida te pregunta si en verdad vas a seguir quemándote con tantas cosas que se juntan, y te preocupa lo que queda por decir. El cielo un poco se oscurece en el otoño, y un viento frío por la puerta se coló; Cuando el reloj que marca el tiempo es el espejo y en la ventana ves que el mundo se escapó. Una canción, vieja pasión, podés oír tras el vendaval; su melodía se detiene ante tu puerta, llamándote, sonando igual que aquella vez, en tu niñez, cuando al pasar a marcha camión, la voz del barrio definió tus ilusiones, y te grabó bajo la piel su sinrazón. En lo sencillo duermen las cosas más bellas; en dos miradas que se cruzan, puede estar una aventura que te lleve a las estrellas, y en una copa cabe todo el ancho mar. Y es el misterio de la música tan alto, que comprenderlo llevará la eternidad; las emociones que te toman por asalto se esconden tras dos o tres notas de verdad. Una canción, vieja pasión, podés oír tras el vendaval; su melodía se detiene ante tu puerta, llamándote, sonando igual que aquella vez, en tu niñez, cuando al pasar a marcha camión, la voz del barrio definió tus ilusiones, y te grabó bajo la piel su sinrazón. Somos parte de este adiós, unos viejos locos aguantando el mostrador; siempre habrá una excusa pa' poder estar, tantos motivos para cantar. Llevo en mi equipaje la razón y mi anecdotario en el corazón, siempre habrá una excusa pa' poder estar contra el destino, mano a mano, en el final. Mareados